El Barcelona no faltará a su cita con las semifinales. Los chicos de Luis Enrique abrieron una puerta más en su camino hasta Berlín al superar con claridad al PSG. Ya fueron superiores a su rival en París y lo volvieron a ser en Barcelona, donde no fue suficiente la presencia de Ibrahimovic yVerratti para los galos.
Con un rondo de noventa minutos finiquitó la eliminatoria el conjunto azulgrana. Los culés llegan al tramo final de la temporada en su pico de forma y de juego. Los aficionados lo agradecen y los rivales lo sufren. Mientras los azulgrana monopolizan el esférico, los adversarios se deben resignar a practicar el atletismo sobre el césped. Correr y correr tras un equipo donde es preciso hasta el portero.
El Manchester City pareció en los octavos de final un equipo de barrio ante el Barcelona y los chicos de Blanc han ido por el mismo camino en su eliminatoria frente a los líderes de la Liga española. No hay que olvidar que la plantilla parisina está confeccionada a base de talonario y cuenta con estrellas como Ibrahimovic, Verratti, Lucas Moura, Cavani, Pastore o Cabaye. Internacionales todos ellos que no sabían por donde les llegaban los azulgrana.
Más allá de sus victorias, los méritos del Barcelona se agigantan cuando se ven a estrellas mundiales impotentes ante los culés. A los cuartos de final de la Liga de Campeones no llega cualquiera y los de Luis Enrique, hacen que sus contrincantes se queden sin armas y sin opciones pese a los millones que tienen en sus cuentas corrientes.
Iniesta, más que estadísticas
Los números no acompañaban a Andrés Iniesta, pero por suerte el balón siempre está su lado. El manchego trata con cariño a la redonda y ella le responde. Esconde el cuero, para el tiempo y hace fácil cosas que muy poca gente en este mundo es capaz de hacer. Las estadísticas no muestran ese tipo de acciones, pero por suerte, Andrés saca el fútbol a la luz.
Los números no acompañaban a Andrés Iniesta, pero por suerte el balón siempre está su lado. El manchego trata con cariño a la redonda y ella le responde. Esconde el cuero, para el tiempo y hace fácil cosas que muy poca gente en este mundo es capaz de hacer. Las estadísticas no muestran ese tipo de acciones, pero por suerte, Andrés saca el fútbol a la luz.
En un día grande, Iniesta fue grande. No podía fallar y fue el mejor de la primera mitad pese a los dos goles de Neymar. De las botas del manchego salió la asistencia que terminó con el primer tanto del brasileño, pero lo importante había estado en los segundos previos. Controló el cuero Iniesta en su campo y sorteó con regates, cambios de juego y diversas acciones de calidad, a cualquier rival que salió a su paso. Levantó al Camp Nou y dio ventaja a su equipo en el marcador.
Por mucho que el PSG presionara en el campo de los locales, era imposible evitar que el balón pasara de Ter Stegen a los puntas azulgranas. Podía ser de forma directa gracias a la precisión del germano o atravesando las diversas líneas culés. Al primer toque y con constantes moviemientos, los chicos de Luis Enrique acabaron con la presión gala.
Tras constantes llegadas al área que defendía Sirigu, hasta Alves quiso estar a la altura con sus centros. Acostumbrado el brasileño a poner el balón al bulto, el lateral recurrió a la izquierda para poner el cuero en la cabeza de Neymar. No perdonó el ex del Santos y con David Luiz buscando lo que él sólo sabrá, anotó el segundo del choque.
Hasta el minuto 72 el PSG no puso a prueba a Ter Stegen. El meta alemán había intervenido hasta entonces con el pie, pero finalmente tuvo que uar las manos para despejar un centrado, pero potente, chut de Ibrahimovic. En su vuelta al Camp Nou, el sueco apenas pudo aparecer. Más méritos de la zaga local que deméritos del punta.
Así, el Barcelona ya espera rival en su bombo con la tranquilidad de haber demostrado que es un claro candidato para el título final. Los posibles rivales sufren mientras los de Luis Enrique disfrutan del fútbol.
Blogger Comment
Facebook Comment